Dependencia emocional

La dependencia emocional es un apego afectivo que sufren muchas personas. Sienten una “adicción” o “enganche” muy fuerte hacia una persona, originada en la creencia irracional de que ese vínculo proveerá de manera única y permanente, placer, seguridad o autorealización. Sienten que “sin él/ella no son nada”, que la necesitan y que no van a encontrar a nadie más con sus cualidades.

Saben que esa relación no les hace felices y que les hace sufrir en muchos momentos, pero aun así se mantienen “enganchados”, y empiezan, entonces, una “lucha” por sobrevivir, para hacer que su relación funcione. Renuncian a todo por no soltar a una persona que ni siquiera les aporta los aspectos básicos que necesitan, sin tener en cuenta su libertad, dignidad y su felicidad.

Los síntomas que se experimentan son principalmente de angustia, de sentirse “atrapado” en una relación que no avanza pero de la que no puedes salir. Cuando experimentas dependencia emocional en una relación que ya se ha roto pueden aparecer síntomas obsesivos de controlar en todo momento a través de las redes sociales por ejemplo que es lo que está haciendo la otra persona y con quien está, generando aun una angustia más grande.

La dependencia emocional nada tiene que ver con el amor, que significa dar y recibir. Cada uno debe sentirse libre, aceptado y recibir del otro la dosis de pasión, amistad y cariño que uno necesita.

 

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